QUÉ IMPORTANCIA TIENE LA HUELLA DIGITAL

QUÉ IMPORTANCIA TIENE LA HUELLA DIGITAL

La huella digital es el rastro que dejamos con nuestra presencia e interacción en la red; y que si se estudia y analiza puede servir para que nos dé un perfil basado en nuestra forma de actuar en la red, nuestros gustos e intereses y nuestras actividades.

Cómo se va creando nuestra huella digital:
La huella digital la vamos creando y dando forma cada día que entramos en
Internet y la vamos a ir formando tanto si somos conscientes (activa) como si
no lo somos (pasiva):

  • De forma activa, por ejemplo creando nuestro perfil en las redes
    sociales, nuestros contenidos en esas mismas redes sociales,
    subscripciones en canales de Youtube o en Blogs, la aceptación de las
    cookies de las webs en las que interactuamos, nuestras búsquedas
    comerciales y compras etc…
  • De forma pasiva, es cuando se recopila información sobre nosotros sin
    nuestro consentimiento ni conocimiento; por ejemplo cuando en la red se
    recoge información estadística sobre el comportamiento del usuario,
    como es el caso de las redes sociales sobre lo que consumimos y nos
    interesa; o por ejemplo cuando nos etiquetan en contenidos o fotos.

Pero la dimensión de la identidad y huella digital tiene una serie de características importantes que nos ha de hacer recapacitar seriamente sobre nuestro comportamiento en la red:

  • Social. La imagen que se proyecta en Internet es reconocida por nuestro entorno virtual. Por lo que nuestra realidad puede no coincidir con nuestra imagen en la red, esto puede llevar a que nuestro entorno más inmediato podría reconocer a dos personas diferentes: la real y la virtual. De aquí lo importante que es que la huella digital represente a la persona real. Esa bipolaridad entre “el yo real” y “el yo digital”, puede llevarnos a una mala reputación en la red y, lo más importante, generarnos consecuencias negativas en el entorno social y laboral, por ejemplo
  • Es subjetiva y dinámica. De forma consciente o inconsciente la vamos construyendo cada uno de nosotros día a día; la vamos creamos y modificando con el paso del tiempo y nuestra interacción en la red. Por ello es importante hacer pedagogía cuando nuestros hijos empiecen a construir su identidad digital, han de ser capaces de tener un autoconcepto sano, claro y real de lo que es la red.  
  • Tiene un gran valor y genera consecuencias. Hoy nuestra identidad digital puede facilitar la creación de relaciones, un ejemplo sería es el flujo de relaciones y colaboraciones a nivel laboral y profesional que surgen en LINKEDIN; y por lo tanto buscamos que estas relaciones sean fiables. Muchas empresas en su búsqueda de personal, cuando llegan los respectivos currículums, hacen barridos por las redes sociales para ver la huella digital del candidato. Cuanto más cierta sea con la realidad y menos margen se dé a la frivolidad o a comportamientos extremos, más probabilidad de éxito tendrá en la búsqueda de empleo. El valor de nuestra huella digital generará consecuencias más positivas o más negativas según el contenido que estemos generando.
  • Es múltiple. Es múltiple en tanto en cuanto la información la podemos generar nosotros, pero también otros en nuestro lugar, por ejemplo publicando fotos de nosotros de una fiesta, de una cena, de un viaje o en una situación que no queremos hacer pública, y en las que nos pueden tanto etiquetar como solo que nos nombren en la publicación. Con el actual escenario de la red, la información puede tener múltiples cadenas de creación y controlar todas es muy complicado.
  • Se mantiene en un contexto. Un comentario en un blog, un tweet o una fotografía puede generar un impacto negativo si se utiliza en un contexto erróneo; o por ejemplo que el comportamiento de la persona sea el de utilizar dichas redes y plataformas como zona de desahogo o de escape. Podemos pensar que nadie lo va a ver; pero todo queda en la red y por lo tanto es susceptible de ser visto o leído por miles y miles de personas.

Por todo ello y dado que es imposible hacer desaparecer y borrar del todo nuestra huella digital, hemos de aprovechar la circunstancia y hacer que este hecho sea beneficioso para nosotros. Es casi imposible conseguir que todo lo que corre por la red sobre una persona sea positivo, nadie es perfecto, y además, hay que tener en cuenta que hay mucho “fake” y “troll” con potentes genes destructivos desde el anonimato. Pero si podemos hacer que el peso de la balanza sea mayor en el lado positivo que sobre el negativo. Y eso si depende de uno mismo. Qué podemos hacer para tener una huella digital que nos refleje realmente al máximo y que sea nos sea beneficiosa y positiva:

  • Desactivar o borrar los perfiles de redes sociales en desuso o parte de sus contenidos que consideramos erróneos, ofensivos o inapropiados. También desactivar aquellas suscripciones, servicios web y cuentas de compra que no utilizamos.  
  • Crear alertas de búsqueda con tu nombre para conocer tus menciones y poder gestionarlas.  
  • Eliminar las cookies de tu navegador para evitar que los sitios web sigan recolectando datos sobre tu actividad.   
  • Valorar la información personal que transmitimos y ser consciente de dónde y con quién se comparte antes de hacerlo. 
  • Verificar la fiabilidad de las plataformas en las que participamos.
  • Ajustar los parámetros de seguridad en las redes sociales para controlar quién puede ver los contenidos que se publican. Aunque hay que saber que todo lo que se pública, queda en la red. 
  • Pensar en el efecto que tu comportamiento online podría tener sobre ti y otros en el largo plazo. Por ejemplo, que impacto puede tener si lo que publicas lo ven o lo verán en el futuro tus hijos; que impacto puede tener si lo ven compañeros de trabajo o futuros reclutadores de empresas etc…
  • En algunos sistemas o plataformas poner doble sistema de confirmación: contraseña y mensaje SMS; contraseñas biométricas etc… Y tener en la medida de lo posible el anti-virus actualizado.

Es verdad que estas acciones no garantizan que tu rastro digital se limpie del todo, pero sí te permiten tener mayor control sobre cómo se está generando tu huella y sus contenidos. Nos permite que nuestra huella digital sea más positiva y beneficiosa y el balance sea mayor en este sentido que todo lo negativo que pueda darse.

Por el contrario, pensar que lo que hacemos en internet no tienen impacto, que no importa nuestro comportamiento, dedicarnos a insultar, o a crear falsas imágenes de lo que somos, son todas ellas actitudes que tienen diferente impacto pero todas ellas sí que tienen un impacto negativo sobre nuestra huella digital; y por lo tanto sobre influye en nuestra imagen tanto pública (internet) como social y laboral. En este caso, esteremos creando una huella digital negativa.

Otro aspecto a tener en cuenta, según el rastro digital que dejamos, es que existen riesgos importantes de ciberseguridad, pues generamos pistas para que el ciberdelincuente tenga la posibilidad de aprovecharse de nuestra huella digital para enviarnos una estafa de “phising”; o darse situaciones de robo de identidad; o de extorsión o acoso, por ejemplo.  

Hace unos días vi un anuncio sobre la importancia de cuidar nuestro comportamiento en la red y por lo tanto nuestra huella digital. La imagen era una chica joven en un escenario y desde el público le iban relatando muchos aspectos de su vida que ella no era consciente que los había publicado en algún momento de su vida (incluso algunas de estas informaciones, hacía años que las había colgado en la red). La joven en el escenario queda estupefacta del volumen de información que sabían sobre ella y al final del anuncio sale una reflexión en voz en off que decía más o menos: “si no eres capaz de decirlo en un escenario, ¿por qué lo publicas en internet?”. La reflexión es de un gran acierto pues internet es un escenario de millones de espectadores potenciales de todo aquello que hacemos, interactuamos o publicamos en la red.

Nuestra huella digital es el conocimiento y la herencia que dejamos sobre nosotros mismos a nuestros descendientes y futuras generaciones. El arqueólogo del futuro buscará información del S.XX y S.XXI con un teclado y ese será nuestro legado tanto para la historia como para nuestros descendientes.

Esta entrada tiene 2 comentarios

  1. Excelente artículo que permite comprender la tarscendencia de nuestras emociones no pensadas.

    1. gracias

Deja un comentario

Cerrar menú